2015/Febrero 12/Asociación de Trabajadores Campesinos del Valle del Cauca-ASTRACAVA/Tuluá
COMUNICADO No 001
A LA OPINIÓN PÚBLICA
La Asociación de Trabajadores Campesinos del Valle del Cauca-ASTRACAVA, creada mediante la resolución 0026 de 2007 del Ministerio del Trabajo y la Protección Social, filial de FENSUAGRO-CUT y miembro fundadora del Movimiento Político y Social Marcha Patriótica, es una organización sindical de carácter gremial que lucha por la defensa y promoción de los derechos campesinos aprobados por las Naciones Unidas en la Declaración Internacional de los Derechos Campesinos. En tal sentido, ha venido interactuando con las instituciones públicas y privadas en Tuluá y el departamento del Valle, es miembro del Consejo Municipal de Desarrollo Rural, CMDR, en todos los municipios donde tiene subdirectivas. La asociación, ha propiciado espacios y proyectos educativos, productivos, de género, de memoria y de defensa de los derechos humanos, de protección del medio ambiente, entre otros; actuando siempre en el marco de lo establecido por la constitución y las leyes.
La agudización del conflicto social y armado, trajo como consecuencia que los territorios campesinos en donde ha existido presencia de las fuerzas insurgentes, hayan sido considerados por los entes gubernamentales como zonas rojas. Violando el principio de distinción al que tiene derecho la población civil, las fuerzas militares, no en pocas ocasiones, ha tildado al campesinado que reside en las denominadas “zonas rojas” de servir como “auxiliador, informante, colaborador”, etc., de la insurgencia. Acusaciones de este tipo, infundadas y perniciosas, han sido la base argumentativa de los grupos paramilitares para cometer los peores vejámenes contra las comunidades agrarias en la historia reciente de nuestro país.
En medio de este escenario, se han gestado las asociaciones campesinas, las Juntas de Acción Comunal, las organizaciones de defensa a los derechos humanos, las de mujeres, las que administran el acueducto, entre otras, todas ellas para infortunio de los pobladores del campo, cuando son dirigidas desde la autonomía de sus integrantes, han sido objeto de persecución, señalamiento, obstaculización intencional y deliberada para su normal crecimiento y desarrollo; Astracava no ha sido ajena a esta terrible situación.
Siempre que nuestra asociación da a conocer su opinión al respecto de los programas gubernamentales que afectan negativamente las regiones que habitamos, como aquellos relacionados a la locomotora minero – energética, siempre que hablamos de nuestras propuestas de bienestar y desarrollo para las comunidades, de aquellas que compartimos con el movimiento agrario colombiano por reforma agraria integral, democrática y participativa; soberanía alimentaria y territorial; y paz con justicia social; surgen entonces los calificativos mal intencionados que hemos mencionado, que ponen en peligro la vida e integridad física tanto de los líderes como de sus familias.
Decimos esto porque desde 2009 venimos siendo blanco de ataques, ataques que se agudizaron el año pasado, esta vez por parte del Batallón de Alta Montaña #10, cuyo comandante no tuvo ningún empacho en decir en el Cabildo Abierto de Derechos Humanos (DDHH) realizado el 14 de octubre en el las instalaciones del Honorable Concejo Municipal de Tuluá que, quienes asistíamos a dicho espacio lo hacíamos obligados y que habían “fuerzas oscuras” que no permitían que la gente del campo apoyara sus proyectos, sabiendo que hemos sido nosotros los que públicamente hemos rechazado dichos proyectos; en efecto, dirigimos una carta formal sustentando nuestra posición al respecto. En los últimos días, se han publicado supuestas denuncias en perfiles de Facebook a nombre de nadie que repiten la misma retahíla de siempre sobre ASTRACAVA y la Marcha Patriótica.
Manifestamos de manera pública nuestro rotundo rechazo a estas artimañas utilizadas para desprestigiar a las organizaciones populares que sustentan propuestas alternativas a las dominantes, poniendo en riesgo la vida de sus miembros y dirigentes. Así mismo, exigimos a las autoridades civiles que garanticen los derechos a la libertad de asociación, a la libertad de pensamiento, y principalmente nuestro derecho a vivir digna y tranquilamente en nuestro país; investigando y castigando ejemplarmente a los irresponsables que sueltan falsas acusaciones en nuestra contra sin dar la cara ni utilizar el debido proceso. Como organización legalmente constituida estamos prestos a colaborar con la justicia para adelantar los trámites que sean necesarios con el fin de esclarecer cualquier hecho que ponga en duda nuestro buen nombre y el de nuestros afiliados.
Finalmente, hacemos un llamado a todo el campesinado, a los intelectuales, a los investigadores, a los trabajadores, a los desempleados, a los jóvenes, a las amas de casa, a los pobladores del campo y la ciudad, a manifestarse en contra de la estigmatización y persecución contra las organizaciones campesinas, fortaleciendo nuestra unidad como hermanos trabajadores del campo y la ciudad, por la reforma agraria, la soberanía y la paz con justicia social.
Astracava - Junta Directiva Departamental
Astracava - Junta Directiva. Subdirectiva Municipal de Tuluá
Tuluá, Valle del Cauca.
Febrero 12 de 2015
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