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La MIA en el Valle del Cauca se pronuncia

COMUNICADO MESA DEPARTAMENTAL AGROPECUARIA Y POPULAR DE INTERLOCUCIÓN Y ACUERDO - MIA VALLE -

San Pedro (Valle del Cauca), Agosto 20 de 2013


A una sola voz indígenas, campesinos, afrodescendientes y sectores populares de varios municipios del Valle del Cauca, salimos a las calles con el propósito de difundir y defender nuestros pliegos de exigencias nacional y departamental. El Pliego Nacional, consta de 6 puntos al respecto de la producción, la tierra, el territorio, el cumplimiento de los derechos e inversión social, exigencias que a través de ejercicios democráticos de construcción colectiva, han sido trasladadas a los escenarios departamentales, para que sean resultas por las autoridades gubernamentales y administrativas.

Los pliegos nacional y departamental pueden ser sintetizados como sigue:

1.    La implementación de medidas y acciones frente a la crisis de la producción agropecuaria.
- El cumplimiento en la implementación de las leyes pesqueras en beneficio de pescadores artesanales.
- La implementación de programas de fortalecimiento a la producción y comercialización de renglones agropecuarios departamentales. Además la toma de medidas para controlar el contrabando de leche que ingresa al departamento.
- La veeduría y acompañamiento del gobierno departamental a la explotación maderera que garantice la sostenibilidad de este recurso y la permanencia de pequeños madereros.

2.      El acceso a la propiedad de la tierra.
- Exigimos que la administración departamental y las alcaldías municipales, en coordinación con el Ministerio de Agricultura y Desarrollo Rural, MADR, el Instituto Colombiano de Desarrollo Rural, INCODER, conjuguen esfuerzos que posbiliten la adquisición de tierras para los campesinos, Resguardos Indígenas y los Consejos Comunitarios que no la posean o la posean de manera insuficiente.
- Exigimos el apoyo logístico y presupuestal en la legalización de tierras para campesinos, indígenas y afrocolombianos que no hayan saneado sus títulos de posesión así como la solución de conflictos relacionados a la titulación individual de predios, a campesinos beneficiarios de proyectos del INCORA en las décadas de los años 80s y 90s.
- Exigimos la redistribución de las tierras incautadas a la mafia y que en la actualidad son administradas por el Estado, para ser distribuidas entre campesinos con problemas de acceso a la misma.
- Exigimos el saneamiento de conflictos relacionados al uso del suelo en territorios altamente intervenidos considerados por la normatividad estatal como Zonas de Reserva Forestal (ZRF) o de otras figuras de ordenamiento territorial que hagan parte del Sistema Nacional de Áreas Protegidas –SINAP.

3.    El reconocimiento a la territorialidad campesina, afrodescendiente e indígena
- Exigimos la constitución de Zonas de Reservas Campesinas (ZRC) en: Florida, Pradera, Palmira, Ginebra, Guacarí, Buga y Tuluá
- Exigimos constituir los Resguardos Indígenas en la zona alta del municipio de Ginebra para la etnia Lili, así como la constitución de un resguardo indígena en Tuluá y tres en Sevilla para la comunidad Embera Chamí.
- Los entes Estatales, serán medio y generará programas de interlocución con las demás instituciones de orden departamental y nacional, para viabilizar la constitución de ZRC Se promoverá a la creación de instancias de concertación con la Corporacón Autonoma Regional del Valle del Cauca – CVC -
- La titulación colectiva inmediata del Consejo Comunitario de la cuenca del Río Naya.
- Exigimos que las administraciones departamentales y municipales reconozcan la autonomía de las comunidades campesinas en el ordenamiento territorial del departamento y municipio, rechazando los megaproyectos y las transnacionales que planteen invertir capital en el territorio y afecten a las comunidades.
- El acceso a los recursos de regalías departamentales y municipales, éstos se invertirán en programas que generen desarrollo y sostenibilidad en las comunidades, con participación directa de las mismas.
- Apoyo en la financiación de proyectos productivos para consolidar el desarrollo agropecuario de la región y estabilizar la propiedad de los campesinos, afrodescendientes e indígenas.
- Exigimos respeto y prevalencia de las figuras de ordenamiento territorial, productivo y ambiental de las comunidades campesinas, afrodescendientes e indígenas sobre las zonas de consolidación y recuperación, así como aquellas de desarrollo agroempresarial.

4.      La participación efectiva de las comunidades y los mineros pequeños y tradicionales en la formulación y desarrollo de la política minera.
- Exigimos la participación efectiva de las comunidades y los mineros pequeños y tradicionales en la formulación y desarrollo del Plan de Desarrollo Minero – Energético del Departamento.
- Exigimos detener la concesión de títulos mineros y revertir las concesiones efectuadas, hasta tanto se defina concertadamente con las comunidades rurales la política minera del país, en la que se garantice el derecho prevalente de las comunidades campesinas, indígenas y afrocolombianas a ser beneficiarias de las concesiones y se brinden garantías para la minería artesanal.
- Exigimos el apoyo, reconocimiento y formalización de la minería artesanal, pequeña y mediana, así como el apoyo para la reconversión tecnológica hacia modelos de producción minera más limpios y de bajo uso de contaminantes, en coordinación con la Coorporación Autónoma Regional del Valle del Cauca, CVC, el Ministerio de Minas y Energía y el MADS.
- Exigimos apoyo desde las instancias de gobierno del departamento, los municipios y la CVC, para que las comunidades, participen en la redefinición concertada de un nuevo Código de Minas y Recursos Naturales.
- Exigimos que se apoye la participación de las comunidades en la construcción de una nueva ley de regalías que redefina la participación nacional y local de los beneficios económicos de la actividad minera.
- Exigimos la promoción por parte de la gobernación del Valle del Cauca, la CVC y las alcaldías municipales de la sujeción del desarrollo de producción minera y energética a los Planes de Desarrollo Sostenibles de las ZRC, los Planes de Vida de las comunidades indígenas y afrocolombianas, así como a Planes de Ordenamiento Territorial construidos participativamente y con atención a estudios sobre vocación del suelo.
- Exigimos el apoyo por parte de la Gobernación del Valle del Cauca, la CVC y los municipios de Palmira, Tuluá, Buga, San Pedro y Bugalagrande para que las comunidades campesinas e indígenas afectadas por la construcción de las centrales hidroeléctricas Amaime y Tuluá, participen en la decisión de la inversión de los recursos captados por las instituciones por concepto de la venta de energía hidroeléctrica. Exigimos un aumento del aporte por concepto de regalías del 6 – 10% de las utilidades de las centrales hidroeléctricas.

5.      La adopción de medidas y cumplimiento de garantías reales para el ejercicio de los derechos políticos de la población rural.
- Exigimos dar cumplimiento a la acción de consulta previa para las comunidades afro e indígenas en proyectos o normativa que afectan los derechos de estos pueblos.
- Otorgar el derecho al Consentimiento previo, libre e informado a las comunidades campesinas sobre proyectos y normativas que afecten su entorno, en lo social, lo político, lo ambiental, lo económico y lo cultural.

6. Inversión social en la población rural y urbana en educación, salud, vivienda, servicios públicos y vías.
- Dotar adecuadamente los centros hospitalarios y de salud tanto en el sector urbano como rural del departamento, así como la vinculación suficiente y cualificada de personal de salud.
- Exigimos partidas presupuestales para inversión social en infraestructura y dotación para educación, vías, red eléctrica, saneamiento básico, agua y alcantarillado.
- Que los acueductos comunitarios sean administrados por las comunidades con criterio social y no empresarial, y promover su constitución donde no se cuente con ellos.
- La construcción de vivienda digna financiada por el Estado tanto en áreas rurales como urbanas, que sean concertadas con los beneficiarios.
- La creación de programas de acompañamiento y veeduría desde la administración departamental y las administraciones municipales a las familias en procesos de desalojo, garantizando vivienda digna durante tal proceso.
- El pago del cargo básico en la tarifa de servicios públicos en los estratos 0 y 2.
- Exigimos la excepción del Impuesto predial para estratos 1, 2 y 3 en la ciudad de Cali y municipios aledaños

Buscando que los entes estatales y particularmente que el gobierno nacional de una respuesta que solucione las exigencias que viene formulando el movimiento agrario colombiano  desde hace décadas, en el Valle del Cauca, más de mil personas nos sumamos al llamado de la Mesa de Interlocución Agropecuaria y Popular (MIA) y de este modo al Paro Nacional Agropecuario, que inició el pasado 19 de Agosto de 2013.

El movimiento agropecuario vallecaucano que confluye en la MIA, se ha movilizado convencido de la necesidad y justeza de encontrar alternativas que le permitan al pueblo colombiano en general y vallecaucano en particular, resolver el conflicto económico, político y social que vivimos y que tiene a la población rural y urbana al borde de un abismo de desigualdad, explotación y pobreza.

Sin embargo, el Gobierno Nacional no solo no reconoce la problemática agropecuaria de los habitantes de los campos de Colombia, sino que también se ha negado a discutir los puntos del pliego de exigencias, ha entorpecido el libre derecho a la protesta y a través del uso excesivo de la fuerza ha reprimido con saña y sevicia a las familias de campesinos, indígenas y afrocolombianos que se encuentran movilizados en varias partes de la nación, siendo el Valle del Cauca una más de las regiones en donde se comprobó que el gobierno de Juan Manuel Santos Calderón, no aprecia la vida e integridad de quienes día tras día producen los alimentos para millones de colombianos, hiriendo a varios compañeros, golpeando a otros y reteniendo ilegalmente a otros tantos, quienes sufrieron la violencia y el maltrato físico y psicológico que caracteriza a la fuerza pública.

Pese a estos desmanes de la fuerza pública, resistimos y mantenemos nuestra voz en alto a sabiendas que esta voz se multiplica y encuentra eco en ciudades y campos en los cuales miles de colombianos se sumarán a la Jornada de Paro Nacional Agropecuario y Popular; en este sentido desde el Departamento del Valle del Cauca seguimos en lucha.

¡Por la Vida y Contra el desarraigo, Viva el Paro Nacional Agrario y Popular!


VOCEROS MIA  - VALLE DEL CAUCA

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